viernes 26 de abril de 2024

El Senasa recuerda a la población norpatagónica las medidas para prevenir la triquinosis

jueves 01 de abril de 2021

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recuerda a la población de Río Negro y Neuquén las medidas para prevenir la triquinosis, una enfermedad que se transmite de los animales a las personas (zoonosis), producida por el parásito del género Trichinella spp.
“La primera consideración es que hasta la fecha no existe una cura para esta enfermedad, con lo cual las herramientas de prevención son fundamentales”, señaló el supervisor norpatagónico de Sanidad Animal, Rodolfo Rivas.
Las personas se enferman al consumir carne insuficientemente cocida o productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres, que contienen en sus músculos larvas de Trichinella. “Hay que tener presente que en nuestra región se han detectado casos en pumas y en jabalíes, con lo cual podemos decir que es una zoonosis que se extiende en la fauna silvestre de la norpatagonia”, indicó Rivas.
A partir de la faena doméstica y la carneada de cerdos en los campos se generan productos porcinos elaborados de forma casera o artesanal usando carnes sin cocción, con lo cual, los chacinados, embutidos y salazones producidos podrían contener larvas de los parásitos que producen la enfermedad. “Y una vez que se consumen esas facturas con Trichinella, las larvas se alojan de por vida en los músculos de las personas”, enfatizó el profesional del Senasa.
Por eso es fundamental que las personas que produzcan y elaboren estos chacinados verifiquen que la carne sea apta para consumo humano. “Antes de comenzar a producir se debe remitir una muestra de la entraña de cada animal que se utilice para que sea analizada en un laboratorio de la zona mediante la prueba de digestión artificial”, recomendó Rivas.
Por otra parte, recomendó a la población en general que “consuma productos porcinos que provengan de establecimientos habilitados y no de lugares informales en los que no se puede demostrar la inocuidad y sanidad del alimento”.
Otra medida de prevención importante es la cocción que se hace de la carne de estos animales. “Debemos prever que la carne en cuestión debe perder su color rosado, típico de las cocciones jugosas, ya que la larva sobrevive a esas temperaturas”, señaló el veterinario. En línea con esto, se debe presente que la salazón, el ahumado, el congelado y la cocción en microondas tampoco matan al parásito. “La carne parasitada tampoco pierde el color, el olor ni la textura”, añadió.
Las personas que tienen la enfermedad pueden presentar fiebre, dolores musculares, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados y picazón, por lo cual “si se consumió alguno de estos productos elaborados sin ningún tipo de control, derivados de cerdo o animales silvestres, la persona deberá asistir lo más rápidamente posible a un centro de salud”, comunicó Rivas