Una maestra fue agredida por alumno de 12 años reveló: "Me dijo 'te voy a pegar' y lo hizo"

Tras sufrir una brutal golpiza por parte de su alumno de 12 años, la maestra de Bahía Blanca Ana María Lencina garantizó que el menor ya protagonizó una situación similar anteriormente en otro colegio, a la vez que destacó la complejidad el entorno familiar, dado que el padre actualmente está bajo arresto. 

En esta línea, sostuvo que "este chico trae un cúmulo de emociones desde su hogar, así que hay que tratarlo de otra manera, con más paciencia". Sin embargo, agregó que "de todo modos, si bien en la preadolescencia los chicos pueden desafiar porque es algo propio de la edad, siempre se respetó el guardapolvo". 

El hecho sucedió el pasado miércoles en la localidad bonaerense en la Escuela Primaria N° 25 "Gral. Juan Gregorio Lemos", luego de que la docente le indique al chico que se sacara la capucha en medio del comedor escolar. Según lo que declaró, este se paró en la mesa y le pegó una piña que le provocó una fractura maxilofacial y un desvío del tabique. 

A raíz del episodio la policía comenzó una investigación encabezada por la fiscal Betina Úngaro de la Comisaría 7°, quien según lo que trascendió, podría restringir la libertad al agresor, puesto que al tener 12 años no puede ser detenido. 

Asimismo, la maestra fue hospitalizada de urgencia en el Hospital Español con motivo de la desviación de tabique y la fractura que le causó el niño. En este sentido, actualmente está realizándose una serie de estudios para detectar cualquier anomalía o gravedad en las lesiones. 

Recientemente en diálogo con un medio radial de la zona, Lencina aseguró que se encuentra mejor, aunque sigue "dolorida en cuanto a lo físico". Además, añadió que "emocionalmente es otra cosa. "En 20 años de docencia jamás pensé que esto me podía suceder, a mí nunca me golpearon, sí he visto agresiones entre alumnos, pero nunca así", relató.

En cuanto al mal momento que vivió en el colegio, explicó que el preadolescente "transgredía" desde el primer día de clases el acuerdo de convivencia que impone anualmente la institución, y que está firmado tanto por los estudiantes como por los padres. 

"Me dijo 'te voy a pegar'. Y lo hizo. El resto de los alumnos todavía sigue en shock. Y el chico, después de pegarme, me dicen que se largó a llorar. Pero eso no lo llegué a ver porque yo me fui al baño, me chorreaba sangre", recordó la docente.