jueves 25 de abril de 2024

En dos semanas, volvieron al país más de 35.000 argentinos

martes 23 de marzo de 2021

La situación de los países limítrofes, donde los casos de coronavirus COVID 19 se disparan y casi a diario se baten récords de fallecidos, derivó en que el Gobierno reduzca el número de vuelos entre el 10 y el 30% a diferentes zonas.
Brasil, donde la pandemia hace estragos y donde se detectaron dos nuevas variantes más contagiosas y letales de coronavirus que la que dio origen a la pandemia, es una de las rutas que más preocupa. Sin embargo, según datos oficiales de la Dirección Nacional de Migraciones (DNM), al país regresaron 3850 residentes, con controles sanitarios internos que fueron escasos o nulos.
La situación parece repetirse. Hace un año, las propias autoridades sanitarias reconocían que el Aeropuerto Internacional de Ezeiza era la puerta de entrada de decenas de viajeros con coronavirus COVID 19.
“Es responsabilidad de cada una de las provincias y de la ciudad hacer el control y seguimiento para que los que regresan del exterior hagan una cuarentena de siete días, más allá de haber ingresado con un PCR negativo”, detallaron fuentes que participaron del encuentro que el lunes tuvieron los ministros Wado de Pedro, Mario Meoni y Sabina Frederic con los gobernadores de Jujuy, Salta, Misiones, Corrientes, Mendoza, La Rioja, Río Negro, Neuquén, Santa Cruz y Catamarca.
Además, en ese encuentro estuvieron el secretario de Interior, José Lepere, la Directora Nacional de Migraciones, Florencia Carignano, la secretaria de Acceso a la Salud, Sandra Tirado, la Directora Nacional de Epidemiología, Analía Rearte.
“Los centros de telemedicina hacen un seguimiento diario de cada paciente. No es un momento ahora en el que nos estemos preocupando sobremanera porque no está circulando en forma comunitaria la nueva cepa. Pero puede ser una cuestión de días. Dependemos de que la gente cumpla con los siete días de aislamiento”, dijeron fuentes sanitarias bonaerenses consultadas por este medio.
Siete de cada 10 personas que regresan del exterior residen en la ciudad o la provincia de Buenos Aires. En el caso de la ciudad de Buenos Aires, el control tiene más pasos, pero aún sigue siendo permeable.