El Gobierno modificó los descansos de pilotos y tripulantes

El presidente Alberto Fernández puso en vigencia un nuevo régimen que regula la industria aeronáutica; especialmente, los descansos de los pilotos y tripulantes de cabina de pasajeros.

Estos cambios tomó por sorpresa a los trabajadores que estaban a punto de iniciar los festejos navideños y se enteraron de la publicación de un decreto que establece nuevas reglas de juego laborales.
La decisión plasmada en el decreto 877/2021 deja ver un acuerdo subrepticio entre el Gobierno y los gremios que más pesan en el negocio aerocomercial en el país. De hecho, haber fijado el mismo día tarifas mínimas en los pasajes, para de ese modo condicionar a las empresas low cost, responde a una demanda sindical que viene de hace años.
Por eso, el silencio sindical llama la atención. Y no es la primera vez que ocurre. Durante el gobierno de Mauricio Macri, algunos gremios aeronáuticos se opusieron a la unificación de las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral, como también al achicamiento de flota y destinos. Y, en particular, el sindicato de los pilotos (APLA), liderado por Pablo Biró, rechazó la idea de modificaciones en el régimen laboral.
Con Fernández ya en la Casa Rosada, la fusión Aerolíneas-Austral se concretó en diciembre de 2020 sin ningún tipo de resistencia.

Más allá de la romantización del relato que hace desde el gobierno de la línea área de bandera -especialmente desde La Cámpora), lo real es que además de las cuestiones financieras deficitarias que implica para el Estado, hubo pérdida de terreno en el campo internacional. Aerolíneas dejó de volar a Roma, que junto a los destinos cancelados de Auckland y Sydney, formaban un emblema del Cóndor.