viernes 26 de abril de 2024

Reglamentan un plan para regularizar deuda de eléctricas, pero su aplicación es dudosa por el atraso tarifario

viernes 22 de enero de 2021

La Secretaría de Energía publicó hoy la resolución 40/2021 que reglamenta la instrumentación de un plan de pagos para que las distribuidoras eléctricas que durante 2020 acumularon una deuda millonaria con Cammesa —superior a los 140.000 millones— puedan regularizar su situación. La medida autoriza la cancelación en 60 cuotas de parte de ese pasivo. El mercado eléctrico estaba esperando desde hace semanas la publicación la normativa, que fue redactada por el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo.
En términos simplificados, en el seno del área energética se discutían dos alternativas: a) que el régimen especial de cuotas —creado por el artículo 87 de la Ley 27.591 (de Presupuesto)— se utilice para cancelar las deudas acumuladas hasta el 30 de septiembre de 2020. O b) que el esquema de créditos se pueda usar también para pagar facturas con Cammesa durante 2021. La Secretaría de Energía finalmente se inclinó por la primera opción.
¿Qué significa eso en la práctica?
Que el régimen especial de cuotas sólo podrá utilizarse para cancelar parte de la deuda millonaria acumulada con Cammesa. El resto del pasivo (el que se generó entre el 1º de octubre y la fecha actual y el que seguramente se acumulará en los próximos meses porque las distribuidoras no están pagando toda la factura de Cammesa) no podrá abonarse bajo el paraguas de este esquema.
El artículo 8 del anexo 1 de la resolución, firmado por Santiago Yanotti, subsecretario de Coordinación Institucional, complica un poco más el escenario. Establece que las distribuidoras interesadas en suscribir un acuerdo de pago con la Secretaría de Energía deberán comprometerse, a partir de ahora, a abonar en tiempo y forma la transacción económica con Cammesa. En caso de no pagar esos vencimientos perderán los beneficios —o parte de ellos— que establece el régimen especial de cuotas.
¿Diseño inconsistente?
La pregunté es: ¿Por qué si, a raíz del congelamiento de tarifas y el impacto de la pandemia, las empresas eléctricas dejaron de abonar —total o parcialmente— la factura con Cammesa, retomarían ahora el pago de las facturas si las tarifas siguen sin actualizarse y la inflación acentuó en estos meses la pérdida real de ingresos?
El espíritu de la regulación que publicó la Secretaría de Energía es claro. Pretende con este esquema presionar a que las distribuidoras eléctricas empiecen a pagar nuevamente toda la factura de Cammesa. El interrogante es si ese voluntarismo será suficiente para alinear a los privados. A priori, parece muy poco probable que eso suceda porque los ingresos de las distribuidoras siguen congelados. “Lo más factible es que las empresas protejan su caja hasta que esté claro qué pasará con las tarifas”, admitió a EconoJournal el presidente de una distribuidora.
Si esa interpretación es la que prima entre la mayoría, hasta que el gobierno no defina qué pasará con las tarifas residenciales en 2021 —hoy la idea más factible es que aumenten un 9%, tal como filtran desde un sector del gobierno—, el régimen creado por la resolución 40 adolecerá de incentivos para funcionar activamente.
Cronograma
Los privados tendrán ahora 15 días para alcanzar un acuerdo con el gobierno y las administraciones provinciales. La idea es que, como condición para acceder al esquema crediticio, las eléctricas presenten un plan de obras para mejorar las redes de distribución que, indirectamente, se financiará con las 60 cuotas que estableció el gobierno.

La discusión por tarifas es el principal en la agenda de Darío Martínez.
Habrá que ver cómo avanza la gestión del programa, aunque el talón de Aquiles sigue siendo la falta de certezas con relación a lo que sucederá con las tarifas. “Si tuviésemos claro cuánto van a aumentar nuestros ingresos, podrían proyectar un flujo de fondos y determinar cuánto podemos pagarle a Cammesa y cuánto invertir en las redes. Pero si esa variable sigue sin precisarse, es imposible proyectar cómo funcionará el negocio en 2021”, precisaron desde otra distribuidora.
Evitar un antecedente incómodo
¿Por qué la Secretaría de Energía no permitió que el esquema de 60 cuotas se utilicen también para cancelar las deudas posteriores al 30 de septiembre o las que se generen en 2021?
Esa era la idea original, pero un sector del gobierno analizó que, en caso de avanzar en esa dirección, se estaría “otorgando un derecho sin contraprestación a los privados”. Aún así, la norma prevé que las distribuidoras que no tengan deuda (una minoría) podrán utilizar los créditos para cancelar transacciones con Cammesa o financiar obras. Pero la mayoría de las empresas no podrá acceder a ese beneficio. Es un premio para las empresas que tuvieron mejor performance, pero no para la mayoría. En una macroeconomía más ordenada y con actualización tarifaria, sería lógico.
La Secretaría de Energía buscó evitar un antecedente incómoda. Permitir que las distribuidoras cancelen en cuotas las facturas con Cammesa durante 2021 hubiese implicado asumir, indirectamente, que lo que recaudan por tarifas es insuficiente para cubrir sus costos. Es decir, que las tarifas están atrasadas. Legal y políticamente, era un lugar en el que un sector de la coalición de gobierno no quería estar. “El esquema fue pensado para cubrir los efectos que la pandemia tuvo sobre el sector eléctrico”, explicó una fuente de la Secretaría de Energía.