Macri analiza hacer su primera cadena nacional en Vaca Muerta para referirse a las tarifas

La situación no da para mas. La presión opositora para empezar a tratar este martes en Diputados un proyecto que limite los tarifazos al gas y la energía, terminaron de convencer a Macri que ya no puede seguir eludiendo un debate central en su proyecto de reordenamiento macroeconómico.

Un día después que se lograra acotar -al menos parcialmente- las disidencias internas del radicalismo y Carrió con la cumbre del jueves pasado, se decidió que Macri realice una visita relámpago a Loma Campana, el primer yacimiento de gas del joint venture de YPF y Chevrón, que marcó el inicio de la explotación de Vaca Muerta.

Es posible que Macri esté acompañado por Juan José Aranguren y el valor simbólico buscado es evidente: Defender los aumentos de tarifas, como la manera de mantener un ritmo de inversiones que lleve al país de regreso al autoabastecimiento. Además, por supuesto, de ratificar a su ministro de Energía, que está bajo fuego cruzado de la oposición y hasta de aliados claves, como el radical Alfredo Cornejo, que este sábado volvió a criticarlo.

La posible decisión de apelar a una cadena nacional -recurso largamente cuestionado por el macrismo cuando lo usaba Cristina Kirchner-, acaso busca darle al mensaje el dramatismo que en rigor tiene: Si se cae el tarifazo lo que se cae es todo el programa macroeconómico de Macri, que trasladó a la sociedad el mayor esfuerzo del ajuste fiscal, mediante la reducción de los monumentales subsidios a la energía, heredados del kirchnerismo.

La visita se Macri a Vaca Muerta se manejó con tal secretismo que ni el propio gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, fue informado con claridad de sus motivos. Será la primera vez que Macri visite el megayacimiento no convencional, un símbolo de la gestión de Miguel Galuccio durante el kirchnerismo, que el PRO criticó y ahora empieza a dimensionar. Sólo la explotación de Techint en el área a través de su controlada Tecpetrol, ya aumentó en más de un 5 por ciento el producido de gas a nivel país.

El tarifazo del gas es crítico porque se trata de la raíz del sistema energético argentino y como explicó LPO, Aranguren fijó para impulsar su desarrollo un precio que más que triplica su valor en otros países con petróleo, lo que impacta y muy fuerte en no sólo en el precio del fluido que paga la gente, sino también en la electricidad.

El gobierno salió lastimado de la ofensiva opositora -que no vio venir- para acotar los tarifazos y necesita con urgencia instalar una narrativa propia no sólo para cohesionar la propia coalición, sino para los próximos rounds de una pelea que está lejos de haberse saldado.

Este martes los distintos bloques peronistas quieren avanzar con el análisis de los proyectos para limitar los aumentos tarifarios y Cambiemos sólo cuenta con el recurso de no convocar a la comisión de Presupuesto que lidera Luciano Laspina, para trabar su arribo al reciento. Pero es un remedio muy extremo e inviable en el mediano plazo. El Gobierno no puede tener eternamente cerrada esa comisión, en la que esperan dictamen varias iniciativas claves para la Casa Rosada.

Acaso por eso, Macri entendió que necesita dar el debate de fondo sobre la política de tarifas y no puede seguir eludiendo un tema tan neurálgico para su proyecto con maniobras como fue la vergonzosa salida del recinto del salteño Olmedo, para dejar sin quórum la sesión de la semana pasada y así evitar el debate. (LPO)