Advierten incremento de denuncias por violencia de género tras el femicidio de Guadalupe

El femicidio de Guadalupe Curual fue un punto de inflexión para los grupos feministas y dejó al desnudo las fallas del aparato estatal y la justicia en la atención de los casos de violencia de género a nivel local.
En las movilizaciones y asambleas que se sucedieron todos los días hasta el 8 de marzo inclusive, surgieron testimonios de muchas mujeres que se animaron a contar lo que les estaba pasando.
Sin duda la tragedia de Guadalupe visibilizó situaciones preexistentes.
En ese contexto, las organizaciones y organismos que atienden los casos de violencia de género advierten un incremento importante en la cantidad de denuncias que se radicaron después del crimen.
“Estamos desbordadas , antes podíamos hacer un trabajo a largo plazo, pero nuestro trabajo tiene que ver con un abordaje integral, es tal la demanda que es imposible, estamos pidiendo por favor que el Estado genere rápidamente todo ese mecanismo de los grupos interdisciplinarios, que sea rápido”, asegura Zulema Aguirre, de la agrupación feminista Las Wakoldas.
La referente señala que recibieron más de 20 denuncias. “Nosotros podemos acompañar a los distintos lugares del Estado, pero no podemos hacernos cargo de los casos. Teníamos casos que veníamos acompañando hace rato, porque no es solo la denuncia, sino que se hace un trabajo integral, talleres autogestivos para que las mujeres puedan tener una independencia económica, pero también emocional”, comenta.
Sobre la situación actual, apuntó que “actualmente hay muchas mujeres en mucho riesgo, no se que evaluación hace el Estado. A nosotros nos desborda”.
En el refugio de mujeres sólo ingresan aquellas que están en proceso judicial y están en riesgo, pero advierten que “hay mujeres que no sólo están viviendo situaciones de violencia de un varón, sino que además están viviendo una situación de vulnerabilidad porque no tienen donde vivir”.
Por su parte, la secretaria de Desarrollo Social, Franca Cendra, aseguró que “aumentaron los llamados, las intervenciones, consultas…todo. A veces ingresan las denuncias desde la policía, a veces vienen directamente a nosotros y las acompañamos a hacer la denuncia. Otras veces ingresan por oficio de la fiscalía o la Comisaría también cuando hay menores y accionamos. Habilitamos el refugio cuando es una situación de mucho riesgo”.


Aguirre señala que después del crimen se advierte un cambio en los organismos. “Está habiendo un cambio con esta crisis social, por el rápido accionar, con la intervención de la fiscalía. Pero siguen diciendo de la falta de coordinación que hay entre los organismos”, agrega.
“El procedimiento no cambió por ahora, pero sí en lo que hace a las comunicaciones de la policía con la Oficina de Violencia y la Fiscalía. Son prácticamente inmediatas una vez que se recibe la denuncia en comisaría. Eso permite que las medidas que se toman también sean inmediatas”, señaló una fuente judicial.
Respecto a qué organismo se remiten las denuncias, la misma fuente explicó: si la denuncia se hace en el marco de las leyes 2785 y 2786, y no surgen de los hechos comisión de delito, van solo a la Oficina de Violencia. Si la denuncia en los términos de esas leyes comprende la comisión de delito (amenazas, lesiones) entonces se comunica tanto a la Oficina de Violencia como a la Fiscalía. Si se hace denuncia simultáneamente por las leyes 2785 y 2786 y además denuncia judicial, entonces las denuncias 2785 y 2786 van a la Oficina de Violencia y la judicial a la Fiscalía.
Por último, detalló que si se recibe denuncia judicial y surgen hechos de violencia de género o violencia familiar, la Fiscalía dispone medidas cautelares y la comunicación inmediata a la Oficina de Violencia. Siempre se va a tener en cuenta la gravedad y naturaleza de los hechos, y los antecedentes del imputado si los tuviere, o antecedentes de violencia, y en base a eso se adoptan las medidas de coerción y medidas cautelares.

Botones antipánico proliferaron después del femicidio
Fuentes allegadas a los organismos intervinientes señalaron que en el 2020 se gestionaron ante la Secretaria de Seguridad varios botones antipánicos. En diciembre la Comisaría 28 recibió varios equipos, pero aparentemente la Oficina de Violencia local no había remitido las asignaciones de los dispositivos. Recién después del crimen de Gudadalupe se ordenó la asignación y entrega: de 5 que había en diciembre, después del femicidio ya hay 12 botones activados en la localidad y se espera la asignación de otros 6 más.